Este martes, el periodista especializado en ciberseguridad Ignacio Gómez Villaseñor reveló el hackeo a los servidores de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León.

Según la información publicada, la posible vulneración involucra un archivo de 14.7 GB que contiene más de 13,000 archivos distribuidos en 960 carpetas. Entre los documentos filtrados se encontrarían fotos de cadáveres, identificaciones, inventarios de armamento, evidencia forense, datos de investigaciones activas, y otros archivos de alto contenido confidencial.

Imagen revelada por el periodista Ignacio Gómez Villaseñor mediante su red social X.

De acuerdo con la información proporcionada por Gómez Villaseñor, el hacker conocido como “Scorpion” habría confirmado su participación en el ataque a través de una publicación en la dark web. En dicha publicación, el hacker detalló que el acuerdo consistió en instalar un dispositivo Raspberry Pi en las instalaciones de la Fiscalía de Nuevo León, lo que permitió infiltrarse en la red interna y extraer información confidencial.

“Scorpion” añadió que la filtración de los archivos sería el resultado de una presunta traición por parte de un funcionario de la Fiscalía, identificado como Paul Cortez Suárez. Según el hacker, Cortez Suárez habría instalado el dispositivo en los servidores de la Fiscalía con el fin de proporcionar acceso a los archivos. Además, el funcionario aparentemente lo habría hecho con la intención de chantajear a sus superiores en caso de ser traicionado o sufrir represalias por parte de la institución.

Publicación realizada por el hacker “Scorpion” obtenida de la dark web.

En la publicación de “Scorpion”, se puede leer: “Hoy vengo a mostrarles un proyecto que salió muy bien gracias a nuestro buen amigo Paul Cortez Suárez (…) Nos contactó para poder atentar contra la Fiscalía de Nuevo León ya que, con sus propias palabras, ‘Me preocupa que estén planeando algo en contra mía’. Desde entonces, colocó una Raspberry programada por nosotros en un switch de la Fiscalía para brindarnos acceso a la red y, de ahí, hacer y deshacer”.

Este incidente pone en evidencia las crecientes preocupaciones sobre la seguridad cibernética en las instituciones públicas y el riesgo de la filtración de información altamente sensible. Las autoridades de la Fiscalía de Nuevo León aún no han emitido una declaración oficial sobre el hecho, pero se espera que inicien investigaciones sobre el caso.

La filtración de estos datos podría tener implicaciones graves en las investigaciones y en la seguridad de los involucrados, por lo que se solicita que se tomen medidas urgentes para evitar la difusión de más información sensible.