Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, rechazó categóricamente que el país sea considerado el “tercer país seguro” para Estados Unidos.
En su conferencia matutina, la mandataria explicó que este concepto no aplica a México, ya que para que un país sea reconocido como tercer país seguro, debe existir un acuerdo bilateral formal, lo cual no es el caso con Estados Unidos.
“Si llegan a la frontera norte, entonces hay una atención humanitaria, porque es una obligación de cualquier gobierno humanitario, que, por cierto, no tiene nada que ver, porque ayer ya andaban diciendo que si (México es) el tercer país y todo, que no tiene nada que ver. Para que haya un acuerdo de tercer país tiene que haber una firma del país que es, digamos, bilateral”, enfatizó.
En este sentido, Sheinbaum destacó que, a pesar de no ser un tercer país seguro, su gobierno brinda apoyo humanitario a los migrantes deportados por Estados Unidos.
Indicó que si una persona se encuentra en la frontera en condiciones extremas, como a siete grados bajo cero, México no puede negarles asistencia y debe repatriarlos de manera voluntaria a su país de origen.
La mandataria también dio instrucciones a la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel Reyes, para que supervisara en Ciudad Juárez, Chihuahua, los centros de atención destinados a recibir a los migrantes repatriados.
“Los centros de atención en la frontera ya se están instalando. El día de ayer, estuvo el secretario (del Trabajo) Marath (Baruch Bolaños López) y hoy le he pedido a la secretaria de Bienestar que pueda ir a supervisar algunos de estos centros y otros secretarios que también van a estar supervisando para poderlos pues para supervisarte que lo más pronto posible estén”, explicó.
Cabe señalar que, según la Agencia de la ONU para los Refugiados, un “tercer país seguro” es aquel donde un solicitante de asilo puede recibir protección internacional adecuada y no ser devuelto a un país donde su vida o libertad esté en riesgo.